Si el tiempo lo permite, trato de sacar a mis ñus a esparcer. Ellos liberan tensiones, y yo con suerte no las genero.
En una de esas tardes, y en un arranque de madre-guay, se me ocurrió llevarlos a la pista del parque a jugar con el balón. Imaginaba que la situación sería la siguiente. ÑU escalando por las barandillas y ñu tirando a puerta sin descanso. Una realidad que me permite estar sentada, controlando desde la distancia y dejando que resuelvan los posibles conflictos.
Hemos llegado a la pista. En ella 2 niños sin balón, de unos 11-12 años aproximadamente.
Mis dos hijos se han puesto a jugar y enseguida los otros formaron equipo rival.
Deseaba que mi ÑU empezara con su dosis de “empericotarse” por cualquier rama, pero esa tarde, decide ponerse de portero. Con un guante de bici...
Obviamente me quedo de pie. Presiento lo peor.
Empieza el partido.
1 segundo, 1 gol.
Al minuto, 4 goles.
A los 5 minutos… había perdido la cuenta.
Y allí seguía ÑU, debajo de los palos. Sin escalar, atento al partido, contando los goles en contra y viendo su marcador a cero
Llegan más niños (todos mayores) y rehacen equipos.
“¿ Vamos a aquellos árboles a escalar ? ” ( intento…)
“ No mami, que ahora vamos a jugar un partido de verdad.” ( ¡¡ noooooooo !!!)
Repetimos.
5 segundos, 1 gol.
Al minuto, 3 goles.
A los 5 minutos… intentan persuadir a mi ÑU portero de que salga a jugar, obviamente es un colador…
( Perfecto, seguro que no quiere y se va por fin a escalar )
Pues no. Acepta y se pone de delantero. ¡¡¿ de delantero ?!! Me lo van a machacar.
No voy a mirar. Que se apañen.
ÑU: “ Mamaaaaaaa… es que no me pasan el balón ”
“ Vete a por él vida, ¡ venga que tú puedes! ”
ñu: “ Mamaaaaaaa… es que no me pasan el balón ”
“ Ya, chicos… tenéis que jugar con los pequeños, que el balón es de ellos ”
Ambos equipos empiezan a marcar tantos. Y mis ñus sin tocar pelota.
El calor empieza a apoderarse de mi.
Los veo correr en todas las direcciones, intentar pararla con las manos dentro y fuera del área, y apartarse cuando parecen que los van a aplastar contra el suelo. Y allí sigo yo, deseando tener tarjetas rojas, banderines y silbato. De árbitra no tendría precio. Todos expulsados y mis ñus jugando tranquilamente. Idílico.
ÑU: " Jopé mami, no nos dejan jugar "
Como que no quiere la cosa, empiezo a lanzar miradas asesinas…
Parecen pasar desapercibidas.
Entonces paso a los toques sutiles: “ Chicos, por favor…pasádsela a los pequeños…”
Parecen pasar desapercibidos...
" Eh... Ya está bien ¿ no ? O se la pasáis a los pequeños o nos vamos con el balón a otra parte "
" Señora, es que no corren rápido y vamos a perder si se la pasamos "
No sé si fue el señora, el escuchar que mis hijos no corren rápido, o la impotencia de no poder entrar en la pista y repartir alguna que otra hostia, el caso es que me vi preguntando:
" ¿ Cariño como vais? "
" Vamos ganando mami, 13-12 "
" Perfecto. Pi-pi-pi. ¡¡ Final del partido !! "
" ¡ Toma ya ! ¡ Ganamos ! "
" ¡ Si cariño ganasteis ! ¡ Qué bien ! "
Entre abrazos y choques de palmas con mis peques vuelvo a escuchar en la lejanía:
" Señora, es que no terminamos... Eso es trampa "
Sólo lo miré.
Intensamente. Muy intensamente.
... Y me pasó el balón...
" You got to lose to know how to win" ( Tienes que perder para saber ganar) ... si lo dice Aerosmith, por algo será...
Dream on