Creo sinceramente que la pregunta debiera de ser:" ¿Qué tal el running mami rockera?"
Y no… : "¿Ya encontraste bragues?"
Pero ¡oye no!. Gana por mayoría absoluta la segunda…así que me estoy dando cuenta, de que independientemente del tiempo que haga en la carrera, si vomito al público, si hago trampa, o si llego hablando en coreano, las importantes son ¡¿¿¿ Mis bragas…????!
Sois unos marranos. Todos.
Vale que la “visión espacial” promete…pero ¡disimular un poco leches! Que una tiene un culo que adiestrar hasta entonces, y una barriguita que pide clemencia, ante dichas nalgas.
¡Y sí! las estoy buscando. Y en cualquier tienda deportiva de Gijón que se precie, conocen la historia y el reto de esta mami rockera. Con situaciones de película...glups.
19 horas. Tarde nublada. Con muchas llamadas. Y demasiados rollos. Aparco con mucha suerte cerca de una tienda de running del centro de la city. Hay un dependiente. Y un cliente masculino de espaldas. Anchas. Y porte interesante.
- Hola buenas tardes, estaba buscando las típicas bragas de atletismo.
- ehhh...Tenemos esto, pero es más bien un culote…tu quieres, ¿bragas?¿bragas?
- Sí, bragas.
- Es que ya nadie las utiliza. ¿Qué son para una niña?
- No. Son para mi…
Automáticamente, el dueño de la espalda ancha y de porte interesante se da la vuelta. No me atrevo a mirar. Y paso de ser una mujer-asertiva a una mujer-tomate…
- Es que hice una apuesta
- Una apuesta ¿que las encuentras?
- No. Una apuesta a que me las pongo.
- ¿Pero para correr?
- Sí ( Mujer-tomate-rechoncha)
- ¿Para entrenar?.
- No. Para u.n.a.m.e.d.i.a.m.a.r.a.t.o.n.e.n.L.o.n.d.r.e.s...
Me atrevo a mirar al dependiente que posa estupefacto, ¡¿mientras mira mis partes?! THUNDERSTRUCK!! …y sin querer reconozco de reojo a la cara con espalda ancha y porte interesante que ¡¿también mira mis partes?! "yeah, yeah, yeah...THUNDERSTRUCK!!"….
Podría haber sido un jambo misterioso. Pero no. Tenía que ser un jugador del Sporting. Que no va a ninguna parte, lo se. Pero yo sabré que él estuvo allí. Hablándome. Mientras yo maduraba como mujer-tomate-rechoncha, queriendo tele·transportarme, mientras ellos debatían con "naturalidad fingida" si alguna marca podría tenerlas...si las habían quitado de Volley por un tema sexista…si había preguntado en tiendas de balonmano…¡Vamos, que muy agradables! Pero...THUNDER!!
Salí de la tienda deseando ser cangrejo. Echando maldiciones sobre esa inoportuna plaza de parking. Y pensando:
“Y si ahora me giro…¿estarán mirándome el culo…?”
Desde entonces sólo entro en tiendas solitarias. Sin explicaciones. Y valorando talles altos sin límites...