El mundo es bipartito. O somos de Melchor. O somos de Baltasar. Del del medio no se acuerda ni Dios, nunca mejor dicho.
Pues aún con la morriña de conservar papeles escritos por mi madre, en los que siempre había un "roce en negro", como si mi Rey Mago preferido destiñera al escribir, desde el año pasado, me he proclamado fiel seguidora de Gaspar. Que cambiar el Muelle por el Náutico como lugar de recepción matutina de SSMM de Oriente ha sido una cagada, no hace falta que os lo explique. Pero que después de estar esperando 2 horas de pie, tratando de contener a mis ñus en aquellas vallas, el único que hizo el recorrido sin atajos, para saludar a TODOS los niños, fue el del medio. Eso no se me olvida. Baltasar vagueó un poco, y Melchor se pasó de guay. Iba y venía dejándonos a medio metro de su venerada caricia de pelo.
Así que en contra de los gustos de mis hijos, este año le pediré mis regalos a Gaspar. Espero que no me defraude.
¿Y tú? ¿Has sido bueno? ¿Quieres que Gaspar te traiga una funda para tu móvil de Las mamis rockeras nunca duermen?
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Mucha suerte a todos. Y gracias Gaspar. Siempre tuya.
